Separación de pareja con hijos

Una separación de pareja con hijos deberá de regularse jurídicamente con un proceso de guarda y custodia si alguno de los hijos es menor o uno de alimentos si es mayor dependiente.

En el caso de que los hijos sean mayores e independientes económicamente no habrá que regular ningún proceso.

Al no estar casados, no será necesario tramitar ningún proceso de divorcio o separación matrimonial, eso sí, se deberá de regular la vida de los hijos para evitar que en cualquier discrepancia de los progenitores puedan quedar expuestos a conflictos.

Lo más difícil en una separación con hijos es que la pareja sepa separar entre lo que es importante para la vida de los niños y lo que no lo es, pues al final muy pocas cosas merecerán la pena como para permitir que la controversia llegue a ser un porblema.

Hay que vivir y dejar vivir y asimilar la ruptura desde un punto de vista adulto, sin entrar en guerras infantiles que no nos llevan a ningún sitio. Una separación es el final de una pareja pero cuando hay hijos comunes es el principio de la responsabilidad por separado de progenitores, que deberán de enfrentarse y superar el reto de ofrecer lo mejor de si mismos sin injerencia del otro en relación a las divergencias en relación a disputas familiares.

Una separación con hijos supone un ejercicio de responsabilidad familiar en el que los miembros de la pareja no deben en ningún caso contaminar y complicar la relación, pues estarán poniendo en riesgo la estabilidad de la familia y el futuro de los hijos comunes, que tienen derecho y se merecen unos padres que le quieran, apoyen y se dediquen a protegerles y no protagonizar juegos de destrucción sentimental.